Gracias a la tecnología cada vez le exigimos tareas más repetitivas a nuestras manos y rara vez les ofrecemos un descanso. La rutina de hoy ofrece ideas de movimiento que se pueden hacer durante el trabajo, son opciones para que las manos recuperen diferentes rangos de movilidad de manera activa. Es posible que al principio no se mueva mucho, o que haya dedos “rebeldes” que no obedecen. Lo más importante es la orden constante, así no se sienta nada, así no pase nada.
Si en algún punto se presenta dolor, no hay que forzar el movimiento. No importa si hay que devolverse un poco, lo importante es encontrar ese punto en donde la mano busca otras formas de moverse. La idea de tener el antebrazo apoyado es darle descanso al hombro y darle una superficie de referencia para evitar trampas como flexión de codos o empuje desde los hombros. Los codos pueden ir doblados o estirados, en gran medida dependerá de la altura de la mesa.
- Antebrazo apoyado sobre una superficie, palmas de la mano mirando hacia abajo. Inhalando levantar dedos y mano, la muñeca se queda apoyada, exhalando separar los dedos tanto como se pueda.
Aquí estamos buscando extensión de muñeca, se puede sentir un estiramiento interesante en la parte de la palma de la mano y un trabajo fuerte en el dorso. La apertura de los dedos es necesaria y casi nunca se hace, por esto es posible que al principio se necesite una pequeña ayuda de la otra mano, eventualmente será más grande. - Antebrazos apoyados, palmas de las manos enfrentadas. Inhalando doblar dedos, cerrar el puño y llevarlo hacia adentro. Exhalando abrir los dedos, separarlos y abrir las manos.
Este es más interesante porque añade el movimiento contrario que es el cierre controlado y consciente. En este movimiento también se puede sentir un trabajo diferente y es interesante encontrar los puntos retantes para poder mejorar. - Dedos entrelazados, codos juntos. Respiración fluida hacer círculos con la muñeca 20 segundos en cada sentido.
Estos círculos permiten que la muñeca logre moverse en todas las direcciones posibles. Nuevamente, si hay dolor se puede limitar el rango o pasar muy lento. Es esperado que se sientan ruidos, esto no es malo ni es razón para parar a menos que esté acompañado con dolor. Las muñecas no están acostumbradas a moverse tanto, entonces pueden ser bastante musicales. - Brazos a los lados, palmas de las manos hacia el frente. Inhalando llevar los dedos hacia atrás, exhalando regresar.
Este movimiento al ir acompañado de la respiración le da un “nuevo aire” a nuestro cuerpo. Los hombros deben estar lejos de las orejas y uno imagina que el aire llega a la parte de atrás y los lados del cuerpo. Si uno quiere una sensación más intensa, los brazos pueden ir a los lados, pero en realidad no es necesario. - Entrelazar dedos. Inhalando girar las palmas de las manos hacia afuera y levantar los brazos. Exhalando regresar. Cambiar el cruce (el pulgar que quedaba arriba pasa abajo)
Esto es similar a “desperezarse” o “panicular”. Es un alargamiento amigable, una forma de dar descanso de la misma posición a hombros, manos e incluso cuello. Un dato curioso es que cuando se cambia el cruce, que al principio puede requerir atención extra, cambia significativamente la percepción del movimiento. Cruzar los dedos es una acto automático, pensar cuál va arriba, cómo los cruzo activa zonas diferentes tanto a nivel cortical como a nivel motriz.